sábado, 21 de junio de 2014

Reformas

Dudo muchísimo que alguien vaya a leer entradas viejas, pero como no me gustan nada y creo que dicen demasiado acerca de una persona que ya no soy, decidí pasarlas a borrador. No las borré porque sería bastante triste perder todas esas cosas que formaron parte de mi vida, pero prefiero que queden en privado. Sí dejé las que están bajo la etiqueta de Intento de escritora y las posteriores al 2011. 
Puede sonar estúpido, pero esto me deja mucho más tranquila. 

Hace poco terminé de corregir mis cuatro primeras novelas (qué raro se me hace llamarlas así, para mí nunca van a dejar de ser experimentos). Esto quiere decir que ya es hora de ponerme a reescribir Proyecto Pandora y empezar con Adagio y la otra historia nueva, que aún no tiene nombre y pienso escribir a mano. 
Me hace feliz volver a estar entusiasmada con la escritura; estuve mucho tiempo despegada y, luego de una época un poco triste, me hizo muy bien terminar Las lunas de marzo y ponerme a corregir.

No creo que nadie lea, pero tengo ganas de decir estas cosas en algún lado. Porque sí, no sé. Ta.

2 comentarios:

  1. Qué bien que estés de nuevo ilusionada con la escritura, mucha suerte con esos proyectos!

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  2. Yo hice lo mismo. Y me di cuenta del gran cambio. Y que me quede con 130 entradas cuando rozaba las 350. Terrible, pero tampoco quise borrarlas, total, siempre fui yo. Solo que me lo quiero guardar para mí

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Nos descubrieron, por fin nos descubrieron. Pasen y vean, qué lindas tolderías: